Me caso… ¿y ahora qué?

La siguiente cosa que os recomendamos hacer si es que no lo habéis hablado nunca antes (es raro pero puede ocurrir) es que os plantéis qué tipo de boda queréis. Por supuesto no tenéis que decidir en el primero momento todos los detalles, pero sí hay ciertas cosas que vais a necesitar saber de cara a la búsqueda de proveedores.

• Número de invitados: como os decíamos antes es muy importante tener una estimación de la cantidad de gente a la que queréis invitar porque es fundamental para realizar una buena búsqueda del espacio, tanto de cara a la ceremonia como a la celebración (si es que van a ser en sitios diferentes). Nadie os exige saber número exacto hasta pocos días antes del día B pero no es lo mismo una boda de 80 invitados que una de 190.
• Presupuesto con el que contáis: nuestra recomendación es que hagáis un cálculo máximo y mínimo para saber de cuánto dinero disponéis y hasta dónde queréis o podéis llegar. Por supuesto el cielo es el límite, pero sí que hay un presupuesto mínimo a la hora de organizar una boda del cual es muy difícil bajar.
• Ceremonia civil o religiosa: esto obviamente es una decisión totalmente personal que tenéis que tomar como pareja. Muchas fincas permiten que la ceremonia civil se realice allí, pero las bodas religiosas en casi todos los casos van a requerir la búsqueda de dos espacios (iglesia y finca/hotel/salón de bodas).
• De día o de tarde: otra decisión que aunque no influye mucho en la búsqueda de proveedores hay que tener en cuenta de cara a posibles limitaciones horarias, o del tipo de luz que queréis que haya en vuestras fotos, o a nivel económico de cara a las horas de barra libre que queráis contratar.
• Finca u hotel/salón de bodas: la tendencia es  que cada vez más parejas eligen las fincas por encima de hoteles y salones, pero como siempre decimos, hay tantas bodas como parejas y cualquier espacio se puede convertir en el ideal para vuestro gran día.